Gigantes farmacéuticos compran empresas en China mientras las pequeñas se retiran

¿Qué tan grande puede ser el negocio que las decisiones de las grandes compañías farmacéuticas dejan de lado las cuestiones políticas? Es un hecho «la fiebre del oro» desatada en la industria provocó una estampida de compras e inversiones en China.

Algunas de las mayores farmacéuticas mundiales, sin dejarse intimidar por las crecientes tensiones entre China y Estados Unidos, están buscando acuerdos en China para reponer sus líneas de producción de medicamentos y aumentar su presencia en el segundo mercado farmacéutico más grande del mundo, dijeron ejecutivos de la industria y banqueros de inversión.

Sólo este año ya se han cerrado varios acuerdos importantes, incluido el de AstraZeneca que compra por U$S 1.200 millones del desarrollador de terapias celulares con sede en China Gracell Biotechnologies y Novartis adquisición de las acciones restantes del desarrollador de terapias para enfermedades renales SanReno Therapeutics por un monto no revelado.

Bristol Myers Squibb y Sanofi también están buscando acuerdos, según los empleados de la empresa, incluso cuando algunos rivales han buscado salir de China a raíz de las interrupciones de la cadena de suministro relacionadas con COVID , una desaceleración económica local y recortes de precios para obtener la cotización de seguros estatales.

El interés extranjero en las farmacéuticas chinas es una bendición para las empresas locales en dificultades y los inversores cansados ​​y ansiosos por sacar provecho de sus inversiones a medida que los reguladores endurecen las normas de oferta pública inicial , poniendo presión sobre las empresas que han enfrentado dificultades para recaudar efectivo para apoyar su trabajo de investigación.

Manas Chawla, director ejecutivo de la firma global de asesoría en riesgo político London Politica, que ha trabajado con clientes farmacéuticos multinacionales, dijo que las adquisiciones les ayudarían a reducir costos, aprovechar empresas innovadoras y obtener exposición al gran mercado de consumo de China.

Pero no está exento de riesgos, afirmó. «La actitud agresiva respecto de China es una forma de consenso bipartidista poco común (en Estados Unidos)».

Los datos de LSEG mostraron que la mayoría de los compradores de empresas de atención médica chinas han sido nacionales en las últimas dos décadas.

Las adquisiciones anunciadas de empresas de atención médica chinas totalizaron U$S 6.800 millones al 16 de julio de este año, la cifra más baja en una década para el mismo período, mostraron los datos.

Entre ellas, las adquisiciones extranjeras representaron un valor de U$S 720 millones, un 52% menos que el año anterior, mostraron los datos.

MODO DE ADQUISICIÓN

Bristol Myers Squibb, que enfrenta desafíos por el vencimiento de patentes, está buscando «oportunidades complementarias», dijo Liang Wu, director de desarrollo comercial de la farmacéutica estadounidense, en una reunión de la Asociación Biofarmacéutica China-EE. UU. en Suzhou a fines de junio.

Dijo que uno de sus intereses en China es el conjugado anticuerpo-fármaco, un fármaco contra el cáncer que combina la terapia dirigida y la quimioterapia. Actualmente tiene un acuerdo para desarrollar y comercializar uno de los medicamentos de la farmacéutica china Sichuan Biokin Pharmaceutical conjugados anticuerpo-fármaco fuera del país.

Wei Wei, director de planificación de nuevos productos de Sanofi, dijo a Reuters que la compra de empresas de biotecnología en China era un objetivo de la farmacéutica francesa y que se había discutido en reuniones. Se negó a proporcionar más detalles.

Un portavoz de Sanofi dijo que la compañía tenía una mente abierta respecto de las adquisiciones y que podía ser estratégica o aprovechar las oportunidades cuando se presentaban, independientemente del país.

AstraZeneca, Bristol Myers Squibb y Novartis eligieron no responder a las solicitudes de comentarios sobre el tema.

«Las empresas multinacionales están interesadas en buscar posibles objetivos de adquisición en biotecnología, medicamentos innovadores y las empresas mejor clasificadas en otros sectores», dijo Sophia Wu, directora general y jefa de atención médica en China en el banco de inversión BDA Partners.

La salud de la mujer, la estética, la neurología y la autoinmunidad también son áreas de crecimiento prometedoras que podrían atraer el interés de los inversores, añadió.

RIESGOS DE CHINA

Aspen Pharmacare de Sudáfrica, que en diciembre anunció que acordó comprar la unidad china del grupo suizo Sandoz, se está expandiendo en otros mercados para equilibrar el riesgo de China mientras continúa buscando activos chinos, dijo Larry Merizalde, CEO de la firma en China.

China representó alrededor del 10% de los ingresos globales de Aspen, dijo Merizalde antes de que se anunciara el acuerdo con Sandoz, pero es solo uno de las docenas de países donde opera la compañía farmacéutica más grande de África.

«Creo que existen riesgos» en China, dijo Merizalde. «Creo que si hay algún conflicto importante o una recesión económica importante, nos veremos afectados, porque cualquiera de esos problemas afectará al mercado farmacéutico en general, por lo que gestionamos esos riesgos como empresa».

Una empresa de atención médica pidió a la firma de asesoría sobre riesgos políticos Eurasia Group que evaluara el efecto de continuar como una empresa estadounidense que fabrica en Pekín frente a la creación de una empresa conjunta o la adquisición de empresas locales para «gestionar cuestiones de acceso al mercado», dijo Jasmine Choi, analista de atención médica y dispositivos médicos de Eurasia. No mencionó el nombre de la empresa cuando se le preguntó.

Para completar una adquisición en China, las empresas multinacionales tienen que pasar por un proceso regulatorio a veces largo que involucra leyes antimonopolio y escrutinio del capital y la transferencia de propiedad intelectual, dijeron abogados y analistas.

Más recientemente, las compañías farmacéuticas y los inversores han preguntado sobre la posible extensión de las restricciones de transferencia de datos de China a las inversiones, dado el impulso más amplio de Estados Unidos para reducir la dependencia de la cadena de suministro de China por la competencia económica y las preocupaciones de seguridad, dijo Choi.

La incertidumbre y el riesgo percibido con respecto a la creciente regulación sobre si se pueden recopilar y almacenar datos genéticos y de salud tanto en China como en Estados Unidos ha aumentado significativamente durante el último año, particularmente en los últimos meses, agregó.

Fuente: Reuters

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