Anemia: la mala alimentación es la principal causa de esta afección

Redacción
24 julio, 2024
Actualidad, Salud
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La anemia afecta a un 20% de los menores de 5 años, a un 30% de las mujeres de 15 a 49 años y a 4 de cada 10 embarazadas según la OMS.

Por su parte, hematólogos del Hospital de Clínicas de la UBA alertaron sobre la falta de controles regulares para prevenirla.

Además de la ingesta de productos ultraprocesados y las dietas de moda carentes de nutrientes.

La anemia es una disminución en los niveles de hemoglobina, una molécula encargada del transporte de oxígeno desde los pulmones a los tejidos que se encuentra dentro de los glóbulos rojos.

Puede ser la causa de sentir cansancio ante esfuerzos, palidez cutánea, caída del cabello, problemas en las uñas e irritabilidad, entre otros síntomas.

Se trata de una alteración que se puede prevenir pero que sin embargo es muy frecuente.

Por lo que será uno de los temas centrales del próximo Congreso Internacional de Medicina Interna del Hospital de Clínicas.

Que se llevará a cabo del 21 al 23 de agosto de este año en la ciudad de Buenos Aires.

“La principal causa de esta alteración en los países en vías de desarrollo se asocia a una mala alimentación”.

También “a dietas ricas en hidratos de carbono con pocos nutrientes esenciales o a infecciones como las parasitosis, endémica en algunas regiones de Argentina”.

“Casi el 50% de los casos son atribuibles a la falta de hierro”.

Así lo sostuvo Francisca Rojas, jefa de la división Hematología del Clínicas.

La médica puso además la alerta en las dietas basadas en alimentos ultra procesados.

“Generalmente son carentes de proteínas, vitaminas y minerales”.

“Esto genera déficit de hierro, vitamina B12 y ácido fólico, componentes esenciales para la síntesis de glóbulos rojos”.

Asimismo agregó que “nuevas dietas como keto o hacer ayuno intermitente, sin el monitoreo nutricional adecuado, pueden conducir a la carencia de alguno de estos nutrientes”.

Sin embargo, según explica la especialista, la anemia suele ser signo de algo subyacente.

Como una afección neoplásica, hematológica, inmunológica, hereditaria, entre otras.

Por lo cual el foco debe estar puesto en la resolución de estas enfermedades.

Añade que “puede estar acompañando a los síntomas de la patología de base e incluso agravar la situación de las personas que tienen enfermedad coronaria o insuficiencia cardíaca”.

Más allá de la aparición de signos como los mencionados, la forma de confirmar el diagnóstico de anemia es mediante un análisis de sangre.

“Lo más importante es realizar los chequeos periódicos de salud recomendados para cada grupo etario”.

“Para que el médico detecte aquellos pacientes en riesgo de sufrirla e intensificar los controles”.

“De esta forma, es posible anticiparse y observar más tempranamente si existe alguna alteración en los niveles de hemoglobina”.

En este sentido, la médica advirtió que la falta de acceso al sistema de salud y de concientización sobre la importancia de los controles periódicos son los principales obstáculos para detectar esta y otras afecciones.

Por lo general los adultos jóvenes tienden a subestimar y no jerarquizar cualquier tipo de síntoma.

En cuanto al tratamiento de los tipos de anemia más frecuentes, se suelen indicar suplementos de hierro, complejo vitamínico B o bien ácido fólico: ya sea por vía oral o bien endovenosa.