cirugía fetal

Una cirugía fetal de alta complejidad se realizó con éxito en el Posadas

El equipo de medicina fetal del Hospital Posadas realizó una innovadora intervención en un embarazo de alto riesgo. Se trata de una fotocoagulación láser fetal mediante fetoscopia. Se practicó en una mujer con un embarazo gemelar monocorial biamniótico complicado con Síndrome de Transfusión Feto-Fetal y restricción de crecimiento selectivo. El Posadas es pionero en el sector público en esta técnica de cirugía fetal y un lugar de referencia para su práctica a nivel nacional.

El Síndrome de Transfusión Feto-Fetal es una de las complicaciones graves que pueden presentarse en los embarazos gemelares. Donde ambos fetos comparten placenta y se produce un intercambio desigual del flujo sanguíneo que pone en riesgo su vida. De hecho, el riesgo de mortalidad de ambos fetos es del 90%. A su vez, tenía restricción de crecimiento selectivo, donde uno de los fetos deja de crecer por tener poca proporción de placenta.

La fotocoagulación láser de los vasos placentarios es un procedimiento mínimamente invasivo. Permite sellar las conexiones vasculares entre ambos fetos y restablecer un flujo sanguíneo adecuado. Guiado por control ecográfico, se introduce un fetoscopio y una fibra láser en la cavidad uterina para tener una visión directa de la placenta. De manera que permita identificar y coagular los vasos por donde se produce el traspaso de sangre (transfusión) entre los fetos.

“Antes del láser tuvimos que sacarle a la mamá nueve litros de líquido amniótico para evitar la ruptura de la bolsa. En este proceso se dañó la membrana que separa a los fetos. Ahí perdimos nuestra referencia anatómica para el tratamiento. Igual lo pudimos realizar gracias a la guía por videollamada, desde Estados Unidos, de Rubén Quintero, referente internacional en cirugía fetal”. Así lo explicó Marcelo Vega Sayago, especialista del área de Medicina fetal y coordinador del equipo de Cirugía Fetal del Servicio de Obstetricia del Hospital Posadas.

Además, precisó que, junto con Sergio Cruz Díaz, realizan en promedio unas siete intervenciones de este tipo por año en el Hospital. A pacientes que llegan derivadas de diferentes lugares del país. En esta oportunidad, el procedimiento se practicó en la semana 23 de gestación y los gemelos nacieron finalmente en la semana 32. Luego de pasar casi dos meses en Neonatología ya recibieron el alta y hoy crecen en su casa junto a su familia.

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