
Perturbaciones en los sistemas de salud a nivel mundial encienden el alerta de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre perturbaciones en los servicios de salud. Esto se desprende de la respuesta del 70% de las oficinas de la OMS. Estas perturbaciones se derivan de las suspensiones y reducciones repentinas de la asistencia oficial para el desarrollo (AOD) destinada a la salud.
Las conclusiones se basan en una rápida evaluación de la OMS de la situación en constante evolución. Y en consecuencia suscitan preocupación por los efectos potencialmente más profundos y prolongados en los sistemas y servicios de salud de todo el mundo. Especialmente en los entornos vulnerables y frágiles. Esto requiere una acción urgente y una respuesta internacional.
El nuevo balance se realizó entre marzo y abril con 108 oficinas de la OMS, principalmente en países de ingreso bajo y medio-bajo. Y muestra que muchos países están trabajando para aumentar o reasignar la financiación procedente de fuentes internas y externas alternativas para subsanar las deficiencias.
Sin embargo, hasta el 24% de las respuestas de las oficinas de la OMS en los países sugieren que los recortes presupuestarios ya se están plasmando en un aumento de los pagos directos. Es probable que las personas pobres y vulnerables corran el riesgo de ser las más afectadas por estas consecuencias.
“Estos resultados dibujan un panorama preocupante sobre los efectos de los recortes repentinos e imprevistos de la ayuda en la salud de millones de personas”. Así lo sostuvo Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
“Aunque estos recortes suponen una conmoción, también están impulsando una transición acelerada desde la dependencia de la ayuda hacia una autosuficiencia más sostenible basada en los recursos nacionales. Muchos países están solicitando el apoyo de la OMS. Y la OMS está trabajando con ellos para determinar y adaptar las medidas más eficaces».
Los informes ofrecen una primera instantánea y muestran las percepciones de las oficinas de la OMS. Que colaboran estrechamente con los ministerios de Salud y les prestan un apoyo periódico. Con respecto a las políticas y la planificación de los sistemas de salud.
El balance tenía como objetivo identificar el apoyo urgente que los países necesitan para evitar efectos catastróficos en la salud de las poblaciones. Y así guiar el monitoreo de la rápida evolución de la situación.
Las suspensiones y reducciones de la AOD están generando perturbaciones en todas las funciones de los sistemas de salud. Y las repercusiones más frecuentes afectan a la preparación y respuesta ante emergencias sanitarias (70%). Le siguen en importancia la vigilancia de la salud pública (66%), la prestación de servicios (58%). Y luego vienen la ayuda humanitaria (56%), y el personal de la salud y asistencial (54%).
Así, los servicios de salud están sufriendo perturbaciones generalizadas en al menos un tercio de los países que respondieron. Registrándose entonces altos niveles de perturbación en los ámbitos de la detección y respuesta a los brotes. Como en el paludismo, el VIH, la tuberculosis, las infecciones de transmisión sexual. Además de la planificación familiar y los servicios de salud maternoinfantil.
La naturaleza y la magnitud de las perturbaciones de los servicios son comparables a las de los períodos álgidos de la pandemia de Covid-19 en algunos entornos.
La escasez crítica de medicamentos y productos de salud está dejando a un tercio de los países que respondieron a la encuesta sin productos básicos para las principales áreas de servicio.
La interrupción de la AOD provocó la pérdida de puestos de trabajo para el personal de salud y asistencial en más de la mitad de los países que respondieron. Así como importantes interrupciones en la formación.
Los sistemas de información se afectaron especialmente, ya que se interrumpe la recopilación de datos de salud clave. Más del 40% de los países experimentaron interrupciones en los sistemas de información clave. Incluyendo los sistemas colaborativos de vigilancia y emergencia. Además de los sistemas de información para la gestión de la salud, los de notificación de enfermedades específicas, de información de laboratorio y las encuestas de hogares y población.
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